El pasado vuelve: preocupación por la salud de Anahí tras su más reciente aparición pública

La actriz y cantante mexicana Anahí, recordada por su papel en Rebelde y su exitosa trayectoria como solista, preocupó a sus seguidores después de su más reciente aparición pública junto a su hermana Marichelo.

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Las imágenes de Anahí que comenzaron a circular rápidamente en redes sociales desataron una ola de comentarios de los usuarios refiriéndose al estado de su cuerpo.

El tema también llegó a la televisión; en el programa de espectáculos Ventaneando, el presentador Pedro Sola comentó: “Anahí está muy delgadita”, comparando su figura con la de su hermana.

Este episodio reaviva la conversación sobre la salud de Anahí y su bienestar físico. En el pasado, la cantante enfrentó públicamente trastornos alimenticios, pues sufrió de anorexia nerviosa y bulimia, llegando a pesar apenas 34 kilos en su peor momento.

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Sus problemas alimenticios

En medio de la gira de reencuentro de RBD, Anahí abrió su corazón y compartió uno de los episodios más difíciles de su vida: su lucha contra la anorexia y la bulimia. La artista confesó que todo comenzó en su adolescencia, cuando tenía apenas 13 o 14 años y asistía a un casting en Televisa para protagonizar una telenovela juvenil.

En aquel momento, un productor le dijo directamente que las protagonistas debían ser “flaquitas y bonitas”, y que ella estaba “gordita”. Aunque podía parecer un comentario menor, para una adolescente que soñaba con la actuación fue devastador. Esa frase se convirtió en el detonante de un largo camino de inseguridades y exigencias que derivaron en un trastorno alimenticio severo.

Anahí relató que empezó a dejar de comer, llegando a pasar cinco o seis días sin probar alimento. En ocasiones su dieta se limitaba a una toronja, a tomar agua o masticar hielo para calmar la ansiedad. Después entró en un ciclo de atracones y vómitos que la desgastó físicamente. Su peso bajó de manera alarmante, hasta llevarla a un estado crítico.

La situación alcanzó un punto extremo cuando, a los 18 años, sufrió un paro cardíaco. La cantante recordó que fue gracias a su prima, quien la llevó de emergencia al hospital, que pudo recibir atención médica y sobrevivir. Ella misma confesó que estuvo al borde de la muerte y que, en ese entonces, no era consciente del peligro real en el que estaba.

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Hoy, con el paso del tiempo y desde un lugar más sano, Anahí reconoce cuánto le afectó crecer en una industria que muchas veces mide el talento a través de la apariencia física. Aunque fue una etapa dolorosa, logró salir adelante con ayuda profesional y el apoyo de sus seres queridos.

En su reflexión más reciente, subrayó que actualmente existen más redes de cuidado, conversación y solidaridad entre mujeres, lo cual puede ayudar a que nuevas generaciones no enfrenten la misma presión destructiva que ella vivió.

Hasta el momento, Anahí no se ha pronunciado públicamente sobre los comentarios y críticas relacionados con su peso. En sus redes sociales, comparte momentos de su vida personal y sus rutinas deportivas, mientras sus fans permanecen pendientes de una respuesta sobre su estado de salud.