Actualizado 10 de octubre de 2025 - 6:11 p. m.
Macron vuelve a apostar por Sébastien Lecornu en medio de la crisis política en Francia
Pese a que el político centroderechista había dimitido días antes, Emmanuel Macron vuelve a nombrar a Sébastien Lecornu como primer ministro.
Periodista Digital
El nuevo primer ministro Sébastien Lecornu junto a Emmanuel Macron.Crédito: AFP
En un intento por frenar la inestabilidad institucional que golpea a Francia desde 2024, el presidente Emmanuel Macron volvió a nombrar este viernes como primer ministro a Sébastien Lecornu, pese a que el político centroderechista había dimitido días antes. La decisión llega en un clima de alta tensión política y con el riesgo latente de que el Parlamento rechace nuevamente al gobierno, como lo han advertido sectores de izquierda y derecha.
Lecornu, de 39 años y uno de los hombres más cercanos a Macron, enfrenta el complejo reto de construir una mayoría parlamentaria capaz de aprobar los presupuestos de 2026, fundamentales para sanear unas finanzas públicas fuertemente endeudadas. Aunque afirmó no haber buscado el cargo, aceptó la misión “por deber”, consciente de que será observado por una Asamblea Nacional fragmentada en tres bloques irreconciliables: izquierda, centroderecha y ultraderecha.
Un Parlamento dividido y dos gobiernos ya caídos
El origen de la crisis se remonta a las elecciones anticipadas de 2024, convocadas por Macron sin consenso con sus aliados. Desde entonces, Francia no ha logrado conformar un gobierno estable, registrando la caída de dos primeros ministros en menos de un año, incapaces de lograr apoyo para sus planes presupuestales. Lecornu, quien ya había presentado su dimisión 14 horas después de anunciar un gabinete que incomodó al partido conservador Los Republicanos (LR), vuelve ahora con la tarea de evitar nuevas elecciones.
Pese a las recientes consultas con los partidos, sigue siendo incierto con quiénes gobernará y qué concesiones hará para evitar una nueva moción de censura. Las primeras reacciones de la oposición no han sido alentadoras: tanto la izquierda radical como la ultraderecha han amenazado con bloquear su gobierno desde el primer día, acusando a Macron de imponer decisiones sin diálogo real.
Cuenta regresiva para los presupuestos y un país al límite
Lecornu tendrá “carta blanca” para negociar y conformar un gabinete que represente una “renovación”, excluyendo a figuras con aspiraciones presidenciales para 2027. Sin embargo, deberá enfrentar debates sensibles, como la impopular reforma de las pensiones, que sigue generando rechazo social y parlamentario.
Su principal misión será presentar un presupuesto creíble que obtenga mayoría en la Asamblea Nacional y estabilice las cuentas públicas, hoy con una deuda que supera el 115% del PIB. El futuro político de Francia y la continuidad del mandato de Macron podrían depender de ese equilibrio frágil entre acuerdos, concesiones y la amenaza constante de un nuevo colapso gubernamental.
*Con información de AFP.