Conflicto armado: La instrumentalización y el reclutamiento ilícito de menores

Históricamente grupos guerrilleros, paramilitares, estructuras criminales y delincuencia común utilizan niñas, niños y adolescentes para sumarlos a sus filas u organizaciones criminales. Las cifras son escandalosas y el promedio mensual en lo corrido del año, a pesar de haber disminuido con relación a 2024, sigue siendo alarmante.  

Un informe de la Defensoría del Pueblo advierte que 162 menores de edad fueron víctimas de reclutamiento ilícito, entre el 1 de enero y el 31 de octubre de 2025, de los cuales 62 % corresponde a niños y adolescentes y 38 % a niñas y adolescentes. El 46 % del total concierne a población indígena.

Los departamentos con mayor número de casos son Cauca (37), Antioquia (20), Chocó (16), Nariño (13) y Huila (11).

En 2024, entre 1 de enero y el 31 de diciembre, se reportaron en la Defensoría del Pueblo 463 casos de reclutamiento de menores, de los cuales 279 fueron víctimas niños y adolescentes y 184 niñas y adolescentes. Asimismo, la población más vulnerable también fue la indígena con 230 casos de menores víctimas de reclutamiento.

Los departamentos con mayor número de casos son Cauca (376), Norte de Santander (47), Antioquia (39), Valle del Cauca (27) y Chocó (16) y Huila (23).

Menores en medio de los bombardeos

Las acciones militares contra organizaciones criminales se han dado en los diferentes gobiernos y se ha cuestionado que en medio de estas operaciones se reporte la muerte de niñas, niños y adolescentes.

De acuerdo con el Instituto Nacional de Medicina Legal, entre 2019 y 2025, han muerto 25 menores de edad en bombardeos de la Fuerza Pública, de los cuales, según la entidad, 15 ocurrieron entre agosto y lo corrido de noviembre de 2025. Es decir, durante las administraciones de los presidentes Iván Duque y Gustavo Petro.

Sin embargo, los reportes que hasta el momento se tienen son los siguientes:

Guillermo Botero, exministro de Defensa del Gobierno Duque, en su cuenta de la red social de X, publicó una carta en la que respalda las acciones militares. Advierte que cualquier menor que se encuentre en un campamento es víctima, pero de los grupos armados ilegales que le reclutan.

Reiteró que el bombardeo contra el campamento de alias Gildardo Cucho fue legitimo en 2019 y cumplió con el Derecho Internacional Humanitario y que los argumentos que antes cuestionó el Gobierno son los que ahora se utilizan.  

“Los hechos muestran que las reglan operan igual sin importar el gobierno de turno. la Fuerza Pública está obligada a respetar los derechos humanos, cumplir la ley y el DIH, y así lo hizo entonces y así debe hacerlo ahora y siempre”

Con ocasión de los recientes bombardeos en el Guaviare y la participación directa de menores de edad en las hostilidades, es importantes precisar lo siguiente: pic.twitter.com/2Hkkv5VwQ8

— Guillermo Botero (@GuillermoBotero) November 14, 2025

¿Qué está pasando?

Laura Bonilla de Fundación Paz y Reconciliación (PARES), le dijo a Minuto60 que no todo lo que se ha dicho de los bombardeos es cierto, como el caso de que “los menores pierden toda protección cuando se convierten en combatientes”, porque ellos nunca pierden la figura de especial protección, sobre todo los menores de 15 años.

Dijo que, en estos casos, como el ocurrido recientemente en Guaviare, se pude presentar un escenario donde los menores se convierten en un objetivo militar, dependiendo de la operación que se esté adelantando pero que eso debe entrar a comprobarlo el ministro de Defensa, Pedro Sánchez.

“Hay contradicciones en las versiones. La primera, que era una versión ofensiva; la segunda, que en medio de esa operación ofensiva hubo un intento de emboscada que estaban ahí y que en ese marco era bombardear o no y yo creo eso es también bastante falaz”, señaló Laura Bonilla.

Añadió que ante este tipo de situaciones Colombia tiene bastantes herramientas que se pueden implementar mediante operaciones de inteligencia como en operaciones del pasado.

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“En este momento nos están tratando de llevar a una disyuntiva donde dicen que la única opción es bombardear a conciencia de que haya niñas, niños y adolescentes reclutados o perder la guerra. Es una falacia”, explicó la experta.

Concluyó que se le está fallando a la infancia del país, por un lado, cuando se les recluta y no se adelanta una campaña de prevención y por otro lado, cuando se les bombardea en las operaciones militares.