Actualizado 2 de septiembre de 2025 - 2:28 p. m.
Ahorro personal: ¿está en nivel básico o avanzado?
Ahorrar puede parecer sencillo, pero en la práctica resulta un reto constante.
Periodista Digital
Ahorrar no es un tema fácilCrédito: PEXELS
Ahorrar puede parecer sencillo, pero en la práctica resulta un reto constante. Para muchos, el inicio del año trae consigo la meta de cerrar el 31 de diciembre con un ahorro importante. Sin embargo, los imprevistos, los bajos ingresos, el alto costo de vida y esos “gusticos” que parecen inofensivos, terminan jugando en contra del propósito.
Ahorrar en dólares una alternativa Pexels
Los errores más comunes
De acuerdo con expertos consultados por Minuto60, los tropiezos más frecuentes de los ahorradores son:
Pedir prestado del propio ahorro.
Posponer el inicio del hábito.
Usar el ahorro para darse gustos.
Ahorrar sin un objetivo claro.
Para Danilo Raymond, mentor financiero y autor de Lo que debes saber del dinero y nunca te enseñaron, la clave está en darle sentido al ahorro:
“Aquellas personas que no tienen un objetivo en mente para ahorrar, con toda seguridad encontrarán excusas para no hacerlo y con dificultad lo van a lograr”.
Danilo Raymond - Mentor Financiero
El experto advierte que en América Latina persiste la costumbre de ahorrar solo lo que sobra después de gastar, un error que impide generar disciplina. “Es muy diferente ahorrar un millón anual durante 30 años, que esperar tres décadas para juntar 30 millones de pesos. La diferencia está en la constancia”, añadió.
Lo que dice la gente
En un sondeo realizado en las calles de Bogotá, los ciudadanos compartieron experiencias y errores comunes en materia de ahorro:
“Uno de los errores más comunes es comer en la calle. Hay que hacer mercado y cocinar en casa”.
“Comprar cosas innecesarias es el error más grande”.
“Solo hay que comprar lo básico, lo que nos permita desenvolvernos en la vida diaria”.
Un hábito que empieza en la mente
El escritor T. Harv Eker, autor de Los secretos de la mente millonaria, lo resume en una frase: “La riqueza comienza en tu mente, no en tu bolsillo”. Y es que ahorrar no es solo un ejercicio financiero, sino un hábito que requiere disciplina, constancia y propósito.
La pregunta que queda abierta es: ¿qué harás tú con tu ahorro?