Categorías

Inicio / deportes
19 de diciembre de 2025
Actualizado 10 de diciembre de 2025 - 11:57 a. m.

Argentina, el campeón que quiere escribir otra gesta histórica en el Mundial 2026

La campeona del mundo aterriza en United 2026 con un proyecto consolidado y el sueño creciente de volver a levantar una copa que ya hizo historia.

WhatsApp Facebook X LinkedIn

Lionel Messi levantando el trofeo de la Copa del Mundo.Crédito: X - @Argentina

En la Selección Argentina hay una verdad que atraviesa generaciones: la historia no solo se hereda, se sostiene. Y llegar al Mundial United 2026 como campeón vigente no es solo un privilegio, sino un compromiso emocional y deportivo con un legado que pesa tanto como inspira.

Tras conquistar su tercera Copa del Mundo en Catar 2022, la Albiceleste se alista para defender su corona en Norteamérica con la madurez de un equipo que aprendió a convivir con la gloria, el sufrimiento y la responsabilidad de un país que vive el fútbol de una forma casi visceral.

Desde su debut en 1930, el país ha disputado 88 partidos mundialistas, conquistado 47 victorias y anotado 152 goles, cifras que lo ubican entre las potencias indiscutidas del torneo más prestigioso del planeta. A los títulos de 1978, 1986 y 2022 se suman las finales pérdidas de 1930, 1990 y 2014, que mantienen viva su competitividad histórica.

(Vea también: Las selecciones debutantes del Mundial 2026; clasificación, historia y lo que esperan lograr)

Un campeón que volvió a creer en sí mismo

La historia reciente de la Albiceleste no puede entenderse sin Catar 2022, un Mundial que devolvió al país un sentido de pertenencia futbolística que parecía desmoronarse. La final ante Francia fue un partido intenso, un duelo que se movió entre la épica y el drama, y tras el 3-3 en 120 minutos, la tanda de penales consagró a Argentina con un 4-2 que pasó a la historia como una de las finales más emocionantes jamás disputadas.

Lionel Messi, alma y brújula de aquel equipo, fue elegido Balón de Oro del torneo tras firmar 7 goles y 3 asistencias, redondeando su mejor rendimiento en una Copa del Mundo. “Es lo que siempre soñé desde chico”, dijo esa noche en Doha, mientras el mundo lo veía levantar la Copa con una serenidad casi mística.

Una publicación compartida por Selección Argentina (@afaseleccion)

Alrededor suyo crecieron futbolistas que terminaron de consolidarse durante la competencia: Enzo Fernández, elegido Mejor Jugador Joven; Julián Álvarez, goleador fresco y explosivo; Rodrigo De Paul, símbolo de la resistencia competitiva; Ángel Di María, protagonista en una final más; y un Nicolás Otamendi que jugó con la autoridad de su vida.

Pero más allá del brillo individual, Argentina triunfó por su estructura. En Catar lideró estadísticas colectivas clave: intensidad defensiva, volumen de pases, balones recuperados y capacidad para generar peligro en distintos momentos del partido, un dominio que logró bajo la conducción de Lionel Scaloni, un entrenador sin muchos pergaminos, pero con una sensibilidad táctica que reformuló al equipo.

La conquista de 2022 no fue solo el regreso a la gloria: fue una reivindicación generacional que aún impulsa al grupo.

Una publicación compartida por FIFA World Cup (@fifaworldcup)

(Le puede interesar: Mundial FIFA 2026: Así quedaron conformados los 12 grupos)

El impulso de una eliminatoria que reafirmó la autoridad

El camino hacia el Mundial United 26 reforzó la imagen de Argentina como la selección más sólida del continente. La Albiceleste aseguró su clasificación con cinco fechas de anticipación, gracias al empate entre Bolivia y Uruguay en la fecha 13. Pero más allá de ese paso gigantesco, hubo una señal que resonó en todo el continente: la histórica goleada 4-1 a Brasil en Buenos Aires.

Ese resultado no fue uno cualquiera. Brasil, el rival con el historial más pesado de la región, sufrió una de sus derrotas más abultadas en Eliminatorias, lo que fue una muestra del control emocional y táctico con el que Argentina afrontó sus partidos en esta fase. La victoria no solo reafirmó la jerarquía del equipo, sino que confirmó la vigencia de su estructura competitiva hacia 2026.

Una publicación compartida por Selección Argentina (@afaseleccion)

Además, Scaloni aprovechó las Eliminatorias para ensayar variantes sin perder identidad. La combinación entre experiencia y recambio abrió espacio a nuevas piezas que podrían tomar un rol central en 2026. El entrenador lo había advertido tras Catar: “El fútbol no te permite dormirte”, y su planteamiento en esta fase clasificatoria demostró que Argentina no cayó en la autocomplacencia del campeón.

Al final, logró ser líder de la tabla de posiciones con 38 puntos, nueve más que Ecuador, el segundo en la clasificación. Sumó 12 partidos ganados, dos empatados y cuatro perdidos, y alcanzó una diferencia de gol de +21, siendo el equipo más goleador de la clasificatoria.

Una publicación compartida por CONMEBOL (@conmebol)

(No se pierda: La revolución tecnológica del Mundial 2026: IA, VAR 2.0, balones con sensores y estadios inteligentes)

El peso de la historia y la promesa del futuro

Argentina llega al Mundial United 26 con un equilibrio singular: memoria histórica, presente consolidado y un futuro que ya comienza a asomar. Desde el brillo de Mario Kempes en 1978 hasta la genialidad de Diego Maradona en 1986, y ahora el liderazgo contemporáneo de Lionel Messi, la selección siempre ha tenido figuras capaces de cargar con la presión cuando el fútbol lo exige.

La pregunta para 2026 no es si Argentina puede volver a ser protagonista, sino cómo elegirá construir su nueva narrativa en el campo. El equipo conserva la base que lo llevó al título, pero también incorpora nuevas figuras que permiten pensar en un ciclo largo, ambicioso y estratégico. El reto será emocional y táctico: convivir con la presión del campeón y sostener la intensidad competitiva.

A diferencia de otros campeones recientes, Argentina llega al Mundial no con el peso desgastante del título, sino con la sensación de que su historia reciente la fortaleció. En Norteamérica buscará algo que solo dos selecciones han logrado: un bicampeonato mundial. Y, como siempre, lo hará desde esa mezcla tan argentina de orgullo, pasión y convicción.

Pase lo que pase, la Albiceleste vuelve a una Copa del Mundo con la certeza de que su camiseta sigue pesando como pocas. Porque la gloria, para Argentina, no es un punto de llegada, es algo con lo que han convivido siempre y no quieren perder.

Una publicación compartida por CONMEBOL (@conmebol)

Actualidad

Pagos de Colombia Mayor: fechas, monto y quiénes recibirán la renta solidaria de $ 230.000

Por Ma. Fernanda López

La-33 revive el porro colombiano con ‘El Mecánico’

Por María Fernanda Sierra

Personas no binarias deben tener garantías para trámite de libreta militar

Por Iván Mauricio Beltrán Acuña

Hallan en Manizales restos de microplásticos en vísceras de res, cerdo y pollo

Por Andrés Marín Martínez

Resumen semanal

Mujer denuncia presunto robo en medio de visita de técnicos de la ETB

Por Camilo Cruz

¿Por qué la Superintendencia de Sociedades multó al presidente del Deportivo Pereira?

Por Heidy Johana Palacio Sánchez

El primer puerto de Colombia hace sus pronósticos sobre el crecimiento económico

Por Angélica Gómez

José Antonio Kast: ¿Quién es el presidente que promete un giro a la derecha en Chile?

Por Dicson Alfonso Cabrera Villalobos