Actualizado 23 de septiembre de 2025 - 8:42 a. m.
Windows 10 llega a su fin: ¿Y ahora?
El 14 de octubre, Microsoft dejará de actualizar Windows 10. Millones de computadores a pagar por los soportes o quedarán expuestos a ciberataques.
Dicson Alfonso Cabrera Villalobos
Periodista Digital
Microsoft anuncia fin de actualizaciones de Windows 10.Crédito: AFP
El próximo 14 de octubre, Microsoft dejará de actualizar Windows 10, una decisión que pone en jaque a millones de usuarios y empresas en todo el mundo. La medida abre un debate sobre obsolescencia tecnológica, riesgos de ciberseguridad y el futuro de los equipos que no soportan Windows 11.
Con más de 650 millones de dispositivos aún en funcionamiento bajo este sistema, según Consumer Reports, la preocupación es creciente. Se estima que hasta 400 millones de computadores serían incompatibles con Windows 11, lo que obliga a los usuarios a pagar un plan de actualizaciones extendidas —30 dólares por un año— o asumir los riesgos de seguridad que implica quedarse con un software sin soporte.
El temor de los usuarios es que el software queda sin soporte. Colprensa
Críticas y denuncias de asociaciones de consumidores
En distintos países ya se levantan voces contra la decisión. En Estados Unidos, Consumer Reports denunció que en 2022 y 2023 todavía se vendieron computadores que no soportan Windows 11, lo que podría dejarlos obsoletos apenas tres años después de su compra. En Francia, una coalición de 22 asociaciones lanzó una petición para que Microsoft extienda las actualizaciones gratuitas hasta 2030.
Los riesgos de no actualizar
Expertos advierten que, sin actualizaciones, los computadores con Windows 10 serán un blanco perfecto para ciberataques.
“Ya no estarán protegidos contra las amenazas más recientes”
explicó Martin Kraemer, especialista en seguridad de la firma KnowBe4.
Además de las vulnerabilidades, también existe el riesgo de que aplicaciones dejen de funcionar correctamente. “Los proveedores dependen del sistema operativo para mantener ciertas funciones. Si no se actualiza, no hay garantía de que las apps sigan siendo estables”, señaló Paddy Harrington, analista de Forrester.
Opciones y caminos alternativos
Para quienes no puedan migrar a Windows 11, hay tres salidas:
Pagar la extensión de soporte ofrecida por Microsoft (temporal).
Usar antivirus y medidas de seguridad adicionales, aunque los expertos insisten en que solo son paliativos.
Migrar a sistemas alternativos como Linux, una opción viable pero que exige conocimiento técnico y compatibilidad con las aplicaciones.
El fin del soporte de Windows 10 marca así un punto de inflexión: para algunos, un incentivo hacia la renovación tecnológica; para otros, un caso de obsolescencia programada que golpea a consumidores y empresas en plena era digital.
*Con información de AFP