Actualizado 26 de noviembre de 2025 - 1:19 p. m.
Una “bofetada” para Ucrania: el análisis del plan de paz propuesto por EE. UU.
Desde la desigualdad de condiciones al papel de Europa en la crisis: lo que dice un experto.
Periodista Digital
Volodímir Zelenski.Crédito: AFP.
Este martes, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, confirmó estar listo para “avanzar” con un mejorado plan de paz propuesto por Estados Unidos.
La potencia norteamericana ha presionado para que el conflicto entre Rusia y Ucrania, que escaló en febrero de 2022 con la invasión rusa, llegue a su fin.
Inicialmente se propuso un controversial plan de 28 puntos, que fue blanco de críticas incluso dentro de EE. UU. por supuestamente favorecer a Rusia.
Aunque el mandatario ucraniano le ha dado luz verde a un nuevo borrador propuesto por el gobierno de Trump, afirmó que aún “hay puntos delicados por abordar”.
En diálogo con Minuto60, Camilo González, docente y analista internacional, comentó sobre los puntos que ha propuesto EE. UU., y las posibles consecuencias de un acuerdo en estas condiciones.
Un plan que dejaba a Ucrania “a su suerte”
Algunos de los puntos más polémicos del plan original incluían la reducción del ejército ucraniano y que este país cediera a Rusia las regiones de Donetsk y Lugansk, lo que fue calificado como inaceptable por Kiev.
González se refirió a este primer borrador y a los cambios que se le hicieron: “Pasamos de 28 a 19 puntos, como se habían consagrado en el primer acuerdo, literalmente era dejar a su suerte a Ucrania frente a Rusia, abriendo la puerta para que este país siguiera expandiéndose territorialmente”.
En estos términos, el académico considera que la potencia euroasiática seguiría expandiéndose sobre lo que considera “su esfera de influencia” pues “tiene que estar liberada de la presencia occidental, en este caso la OTAN”.
Europa y una “bofetada” para Ucrania
Sobre el papel de Europa en la crisis, el docente afirma que el continente ha visto en el conflicto una oportunidad de posicionarse frente a Estados Unidos, “incluyendo a un nuevo actor a nivel global, pues defiende una causa relacionada con el orden liberal internacional”.
En este sentido, Europa no sólo defiende las bases de “la soberanía y la integridad territorial de Ucrania y de cualquier otro Estado, también se opone frente a la autocracia que es representada por Rusia”, afirma González.
“El acuerdo que se presenta en estos momentos es literalmente una bofetada a la posibilidad de que Ucrania, como un Estado independiente, conserve esa calidad de ser un Estado soberano y un Estado que tenga integridad territorial”, dice el catedrático.
Una nueva era imperial
“Ciertamente, permitirle a Rusia que se quede con parte del territorio ucraniano es abrir la puerta a un precedente muy negativo para que otras potencias hábiles de expandirse territorialmente lo hagan”, explica González.
Para dar luz a esta idea, el docente pone como ejemplo el caso de China y Taiwán, pero afirma que “otras potencias podrían hacer lo mismo, justificando que, si Rusia lo hizo, ¿por qué no podemos hacerlo nosotros?”.
“Estaríamos en una nueva era expansionista e imperial que pensamos que había quedado en el pasado”, concluye González.