Actualizado 7 de noviembre de 2025 - 1:20 p. m.
El gobierno retrocede y mantiene gratuito el uso de Bre-B y otras plataformas
El Ministerio de Hacienda y la DIAN reconocen las críticas al proyecto que pretendía imponer una retención a los pagos digitales.
Periodista Digital
Germán Ávila, ministro de HaciendaCrédito: Colprensa
Luego de semanas de críticas, el Ministerio de Hacienda y la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN) anunciaron el cambio en su proyecto de norma con el que pretendían poner una retención en la fuente de 1,5 % para todos los pagos por plataformas digitales como Nequi, Daviplata y Bre-B.
Similar a lo que ocurrió recientemente en Brasil con el sistema de pagos inmediatos de bajo valor PIX, la versión carioca de Bre-B, el gobierno decidió dar marcha atrás a su idea de sumarle el cobro de un impuesto al uso de canales digitales para hacer pagos, según su argumento, con la idea de equilibrar la cancha para todo tipo de pago.
En Brasil, fue el presidente Luíz Inácio Lula da Silva quien personalmente grabó un video firmando en papel el compromiso de no imponerle pagos a PIX. En el caso colombiano, fueron el ministro de Hacienda, Germán Ávila, y el director encargado de la DIAN, Carlos Emilio Betancourt, quienes emitieron sus videos y comunicados para explicar la decisión.
Nivelar la cancha
La idea del proyecto de resolución era, según la DIAN y el Ministerio de Hacienda, que tanto los pagos mediante datáfono con las tarjetas de crédito y débito como los pagos por canales digitales como las pasarelas de pago, los códigos QR, las billeteras digitales como Nequi y Daviplata y el sistema de pagos inmediatos de bajo valor Bre-B tuvieran las mismas condiciones tributarias para no priorizar uno sobre otro en los incentivos a los consumidores para usarlos.
Sin embargo, desde la academia, el sector financiero e incluso los emprendimientos tecnológicos, le advirtieron al gobierno que el resultado sería exactamente el contrario: incentivar aún más el uso del efectivo para las transacciones en el país.
El director encargado de la DIAN señaló al respecto que recibieron “más de 170 comunicaciones con comentarios acerca del proyecto. La mayoría de estos coincidió en que la retención generalizada del 1,5 %, aun cuando apuntaba a corregir la asimetría regulatoria entre esos dos grandes ambientes para los pagos, podría impulsar el uso desmedido del efectivo, lo cual debilita los alcances de verificación de trazabilidad de las transacciones que es una herramienta útil en nuestra lucha contra la evasión y el contrabando”.
Así, el proyecto no se eliminará, sino que pasará a firma y aprobación de las autoridades económicas del país, pero con un cambio importante: la tarifa ahora será de 0 %. Eso significa que, una vez firmado el decreto, ningún pago electrónico o con tarjetas, aunque sean de crédito, serán objeto de la retención en la fuente sobre el impuesto de renta.
La advertencia del sector
En su momento, cuando se publicó el proyecto de decreto, quienes trabajan en el sistema financiero le advirtieron al gobierno que la medida incentivaría el uso del efectivo, que ya es el método de pago predominante en el país, lo que dificulta tener información sobre las actividades formales, informales, legales e ilegales.
El ejemplo está en Brasil, donde PIX convirtió a los pagos digitales en el principal método de transacciones económicas en menos de cinco años. Esto impulsó a su vez a la inclusión financiera, la formalización de la economía y el mayor crecimiento del país incluso sin cobrar impuestos adicionales.
Hace tres años, cuando el Banco de la República y los diferentes representantes de bancos, fintech y demás actividades del sector financiero empezaron a trabajar en la idea de un sistema de pagos inmediatos de bajo valor, se inspiraron justamente en Brasil y su éxito para reducir el uso del efectivo y aumentar el crecimiento económico.
