Diego Londoño llevaba dos años desaparecido en Colombia: lo encontraron por un TikTok en Ecuador

En el mundo vertiginoso de las redes sociales, una simple grabación puede convertirse en un faro de esperanza. Esto es precisamente lo que le sucedió a la familia de Diego Londoño, un hombre colombiano que llevaba dos años desaparecido, y cuya vida dio un giro de 180 grados gracias a un video de TikTok filmado a miles de kilómetros de distancia.

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La historia comenzó en el sur de Ecuador, en la ciudad de Machala. Allí, Amy Solano, una empresaria e influencer local, grababa un video para promocionar la nueva colección de su marca de ropa, Rafaela.

La grabación, pensada para su perfil de TikTok, era un momento cotidiano en la tienda, pero captó un instante extraordinario. Mientras se grababa, un hombre en la calle se detuvo frente a su ventana y le regaló una sonrisa, un gesto fugaz pero lleno de vida.

En apenas una semana, el clip logró el extraordinario alcance de 32 millones de reproducciones y 28 millones de comentarios. La mayoría era de curiosos que encontraron una similitud entre el desconocido personaje con el famoso tiktoker Diego Rodríguez.

“Yo sí lo baño”, escribieron decenas de veces haciendo alusión a que si se aseaba y ponía buena ropa, el desconocido podría ser “un buen partido”. Incluso, el mismo Diego Rodríguez se pronunció en sus redes sociales bromeando con la situación.

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El comentario que lo cambió todo

Aunque millones de personas lo vieron, una en particular le dio un vuelco a la historia. En efecto, Lucía Londoño, la hermana de Diego Londoño, sintió que su corazón se detenía al reconocer esa sonrisa. Por años, su familia en Cali, Colombia, había buscado a Diego, quien padece de pérdida de memoria y había desaparecido sin dejar rastro. La búsqueda había sido un camino de dolor y frustración.

En un acto de pura desesperación y fe, Lucía comentó en el video de Amy: "Él es mi hermano. Lo estamos buscando hace dos años". Luego apareció Marta, otra hermana.

“Hola Amy, soy Martha Londoño, desde Medellín. Ese joven es mi hermano, se llama Diego Luis Londoño, es colombiano, tiene 41 años. Su esposa y su hija viven en Alemania. Gracias por devolvernos la alegría de volverlo a ver y saber de él, eres un ángel enviada por Dios”.

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Después surgió Olga Judith Londoño. “Saludos Amy, el chico del video es mi hermano. Se llama Diego Londoño, somos de Colombia y llevamos tiempo buscándolo. Qué alegría verlo. Por favor, si lo contactas, escríbenos a cualquiera de nosotras, estaremos muy pendientes”.

Lo que siguió fue una colaboración inesperada. Conmovida por la historia, Amy se puso en contacto con la familia y se unió a la causa. La influencia de sus redes se convirtió en una herramienta para la búsqueda, pidiendo a sus seguidores que ayudaran a dar con el paradero del hombre de la sonrisa.

Las pistas comenzaron a fluir y la más importante llegó a través de una transmisión en vivo de una iglesia en Perú. La familia vio con asombro a Diego, sentado en una banca, y supieron que su larga pesadilla estaba a punto de terminar. La localización en Perú confirmó que Diego había recorrido un largo camino desde su hogar, una travesía que culminó con este descubrimiento milagroso.

Hoy, la familia Londoño se encuentra en los trámites finales para traer a Diego de regreso a Colombia, un reencuentro que se espera con gran emoción. Esta historia es un recordatorio poderoso de cómo un simple gesto de amabilidad, capturado por casualidad y amplificado por las redes sociales, puede unir continentes y devolver la esperanza a quienes la habían perdido.

@amysolanogutierrez

Cada vez estamos más cerca de encontrarlo. ✨

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